La gobernadora Carreras definió acortar de los cinco a los cuatro meses la aplicación de dosis de refuerzo contra el COVID-19.
De esta manera y ante la recomendación del Ministerio de Salud de la Nación, las autoridades sanitarias rionegrinas redujeron a cuatro meses el periodo de interdosis para todas aquellas personas que hayan completado el esquema inicial de vacuna contra el COVID-19.
La estrategia se fundamenta en el avance de la vacunación en la provincia, donde el mayor número de terceras dosis se han aplicado en Personal de Salud (10.837 terceras dosis), y en mayores de 60 años (46.346 terceras dosis).
Asimismo, indicaron que en Río Negro se está en condiciones de vacunar con terceras dosis a toda la población que la requiera, ya sea por cumplimiento de tiempo interdosis como por la disponibilidad de vacunas en la provincia.
La cartera sanitaria de la provincia explicó que adelantar la aplicación de la dosis de refuerzo no está dirigido a disminuir el número de casos, sino a ofrecer la máxima protección para minimizar hospitalizaciones y muertes a quienes tienen más exposición y riesgo.