Un hecho que la propia Asamblea Permanente en Defensa del Río Colorado destaca en las últimas horas, pone de manifiesto la tensión vivida ayer, en oportunidad del acto homenaje por los 50 años de la Travesía del Río Colorado.
Expresamente relatan desde la plataforma que la situación estuvo dada por la exhibición de las banderas de la entidad y presencia con chalecos.
«Esperamos mucho tiempo que los integrantes de la «Expedición al Colorado» vinieran a la Comarca a conmemorar los 50 años de la travesía. Hoy, su visita nos deja un sabor agridulce».
«Luego de escuchar con emoción sus aventuras y vivencias les preguntamos sobre qué les hacía sentir el estado actual del río Colorado. Si bien se mostraron preocupados por los cambios que ha sufrido el río, pidieron que hagan lo necesario quienes detentan el poder para hacerlo. Sin embargo, al finalizar la conferencia y a solas con la Asamblea, nos solicitaron (paradójicamente tal vez) que no nos hiciéramos presentes con banderas en defensa del río porque «lo de ellos era una celebración y se la arruinábamos» con nuestra acción política. Claramente lo que para ellos es un festejo y una fiesta para nosotras es una tragedia».
«No vemos en nada contradictorio celebrar la histórica hazaña con una manifestación pacífica que pone en discusión la diferencia sustancial de caudal que el río presenta actualmente y no el merecido reconocimiento a sus expedicionarios. Nuestras banderas son las de siempre, las que expresan la defensa contra el saqueo».
«Por esta razón pensamos y sentimos que lo mejor es que estén presentes en cualquier evento que tenga que ver con nuestro río. Pero nuevamente recibimos rechazo y violencia. Nuestra compañera asambleísta y concejala electa por el pueblo de Río Colorado fue menospreciada y censurada en la foto al tapar su pechera “porque estaba haciendo política». Si la Asamblea hace política, hace política territorial en defensa del agua, hace política a partir de un grupo de mujeres y hombres que piensan en el futuro de sus hijxs y nietxs, hace política porque vive a la orilla de un río que ve desaparecer día a día y que todos los inviernos tiene que sentarse a velarlo un poco más».
«Esperamos con ansias que el siguiente aniversario los aventureros tengan el agua suficiente para no tener que arrastrar los kayaks entre las piedras y entiendan que nuestras banderas buscan un futuro en el que hayan más aventuras como esa porque sin río no hay expedición, no hay aventura, no hay vida».
«Hoy como siempre decimos: NO A PORTEZUELO, NO AL TRASVASE, SÍ AL COLORADO, AGUA PARA LOS PUEBLOS», indicaron desde la Asamblea.