El legislador Marcelo Szczygol (JSRN) presentó un proyecto mediante el que propone que Río Negro adhiera a la ley nacional
27454, que crea el Plan Nacional de Reducción de Pérdidas y Desperdicio de Alimentos. Así, busca darle continuidad a una iniciativa que contribuye a definir políticas públicas en el ámbito nacional, provincial y local de seguridad alimentaria y cuidado del ambiente.
Esta iniciativa -si avanza- dará estado parlamentario al proyecto original que presentaron oportunamente los legisladores mandato cumplido Daniela Agostino y Jorge Ocampos.
El objetivo es profundizar el diseño de instrumentos de intervención política para contribuir a reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos, fomentando su donación, fundamentalmente a través de la concientización y participación de todos los agentes que intervienen en las distintas etapas de las cadenas productivas hasta el consumidor, de manera organizada, coordinada y estructurada.
El concepto de pérdida de alimentos se refiere a la disminución cualitativa o cuantitativa de alimentos destinados al consumo humano, independientemente de su causa, desde la producción hasta el comercio minorista. A su vez, el concepto de desperdicio de alimentos se vincula al descarte que se genera en las etapas de comercializacion y consumo, es decir, cuando los alimentos son aptos para el consumo humano pero se descartan por algún motivo. Este último concepto se asocia principalmente con el comportamiento y las prácticas de los comercializadores, servicios de alimentación y consumidores, mientras que la pérdida de alimentos se vincula con el sistema de producción propiamente dicho y su eficiencia.
En este marco es importante señalar que, en el año 2011, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estimó que un tercio (1/3) de los alimentos producidos en todo el mundo se pierde o se desperdicia en las cadenas de producción, comercialización y consumo.
En complemento a esos datos, en el año 2019 la FAO desarrolló el Índice de Pérdida de Alimentos, mediante el cual estimó que anualmente se pierde el 13,8% de la producción mundial de alimentos. Por su parte, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), ha publicado el Índice de Desperdicio de Alimentos 2021, el cual encuentra que el 17% del total de alimentos disponibles para los consumidores se desperdicia. Mediante estos datos se ratifica que las PDA constituyen un problema global que afecta a todos los países.
Los alimentos producidos y no consumidos, representan un desperdicio de recursos naturales como energía, agua, suelo, nutrientes y otros insumos utilizados en su producción, lo que aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero y genera un impacto negativo sobre el medio ambiente.